Roxane Coaching and Business Training en Barcelona
¿Has experimentado alguna vez este miedo o bloqueo a la hora de hablar otra lengua… esta casi parálisis a la hora de expresarte en un idioma extranjero, que no te deja casi pensar? Será que te has encontrado con ansiedad lingüística. Puede ser momentánea, como duradera, en función de las situaciones y circunstancias. Es tiempo de no sólo explicar sino también normalizar este fenómeno, muy común.
Ante todo, ¿de qué se trata?
Se trata del miedo, bloqueo y/o nerviosismo que nos surge al expresarnos en una lengua extranjera. Puede tener un impacto significativo a la hora de aprender otro idioma, y en España afecta a una parte importante de la población. Tiene consecuencias emocionales importantes, como la frustración, la baja autoestima, la rabia, la vulnerabilidad. Esta última suele ser muy frecuente y de importancia considerable, ya que sentimos que no estamos a nuestro máximo potencial comunicativo. También las circunstancias externas pueden favorecer o aumentar esta ansiedad; por ejemplo, el hecho de hablar en grupo o delante de una audiencia puede aumentar considerablemente la ansiedad y sus efectos negativos por miedo de ser juzgad@s por l@s compañer@s de clase o l@s hablantes nativos.
¿Cómo se manifiesta?
Entre otros, las consecuencias físicas más frecuentes que tiene la ansiedad lingüística son nerviosismo, palpitaciones, sudor, temblores, hasta bloqueo mental.
¿Por qué se produce?
Por un lado, la ansiedad lingüística aparece de manera intrínseca, cuando una persona se siente estresada, ya sea porque tiene miedo a cometer errores o porque le da vergüenza expresarse en una lengua que aún no domina.
Por otro lado, se evidencian factores extrínsecos que explican la aparición de la ansiedad lingüística en un país como España más en particular, debido al sistema educativo basado en la gramática, sin profundizar ni resaltar aspectos primordiales como la pronunciación. También, se observa la clara falta de exposición a la lengua, ya que las películas dobladas no permiten el oír un idioma extranjero.
La buena noticia es que nunca es tarde para enfrentarse a ella y aprender a manejarla.
¿Qué podemos hacer?
Como en muchas ocasiones en el mundo del Coaching, no se trata de hacerla desaparecer, sino que se desarrolla herramientas y habilidades que permitan enfrentarse a ella y manejarla a su manera. Se trata de desvelar la verdadera razón que aparece en estas situaciones incómodas, y trabajar en ella.
Es clave que el aprendizaje se desarrolle en un entorno positivo, seguro emocionalmente y participativo, para que cada persona se sienta cómoda de expresarse con soltura, sin prejuicios, sin miedo y con confianza. Sin embargo, para llegar a ello, se necesita entender y aceptar sus emociones, lograr una mayor confianza en sí mism@.
Con un proceso de Coaching (a lo mejor sólo hace falta un par de sesiones), se podrá encontrar y desarrollar estas nuevas herramientas internas, que van más allá de los consejos externos como pueden ser escuchar podcasts, ver series y películas subtituladas, leer libros en otro idioma, etc. El impacto del Coaching aportará una perspectiva tanto nueva como reveladora y dará lugar a unas personas más confiadas, relajadas, sueltas y cómodas a la hora de expresarse en otro idioma.